Si lo dice Cúper, Riquelme es posible

Lo dijo Héctor Cúper en Canal Sur y es la noticia que convulsiona al beticismo. El equipo verdiblanco está estudiando muy seriamente la incorporación de Juan Román Riquelme a su plantilla. Una apuesta que suena a disparatada por los cuatro millones de euros que el argentino cobra del Villarreal viendo sus partidos desde la grada, los mismos que en su día impidieron su fichaje por el Atlético de Madrid o su regreso a Argentina. Pero si lo dice el propio Cúper, está claro que agua lleva el río. Sorprende que se haga público y que se apunte tan alto, pero verdaderamente, si hay dinero suficiente, lo demás está rodado. La Liga de Fútbol Profesional habilitaría la operación, posible por la baja de larga duración de Nano, que en sus seis meses de rehabilitación, como mínimo, se quedaría sin ficha. Con una plaza vacía, podría llegar un jugador que no está inscrito y que ve los partidos del equipo que le paga desde la grada. El propio técnico verdiblanco lo ha asegurado. Se trata de un jugador que le gusta, aunque no es su amigo, y que tiene la capacidad de producir en el Betis ese cambio de mentalidad que tanto ansía, ya que se trata de un megacrack capaz de echarse todas las responsabilidades a la espalda. Con fama de díscolo y caprichoso, inconstante en el juego y en la disciplina, y muy exigente a la hora de tratar con los clubes, a los que le suele exigir hasta una plaza de aparcamiento privado en la ciudad deportiva. Tímido y muy reservado. Así es Juan Román Riquelme. Con la aurora de maldito. Con la aurora de crack.

Nada que perder

Después de la resaca de la Champions League, el Sevilla regresa a la Liga con la necesidad de recuperarse anímicamente. Con un partido menos, el equipo alcanza nada menos que la segunda posición, pendiente del partido menos que contabiliza y que tendría que jugar el próximo 5 de diciembre ante el Osasuna. Los retrasos aéreos han obligado a Juande a improvisar el plan de trabajo de la semana, pues no pudo desarrollar la habitual sesión de trabajo de los jueves y hasta prácticamente 30 antes del choque no ha podido desarrollar una sesión preparatoria. Al menos podrá contar con algunos de los que no participaron en el choque europeo o se quedaron en Sevilla, como fueron los casos de tres de los últimos fichajes, De Mul, Mosquera y Koné, que tienen escasas posibilidades de entrar en el choque de inicio, pero sí de participar a lo largo del mismo, sobre todo el delantero . Con respecto al equipo que puede poner en liza, es previsible que el técnico regrese al trivote, una formación habitual cuando el que tiene en frente es nada menos que el Barcelona. Un viejo conocido que también llega con cansancio acumulado y con muchas más dudas en su planteamiento, aunque muy motivado. En la Ciudad Condal no se olvida la Supercopa del pasado año, por lo que el Sevilla es declarado enemigo público, pero como contrapartida, tiene el mismo cansancio acumulado debido a su compromiso del jueves ante el Olympique de Lyon. Los precedentes no son los mejores posibles. En el Camp Nou, el Sevilla ha perdido 47 partidos, ha empatado 10 y se ha impuesto en sólo 6, el último de ellos, en la temporada 2003-2004. Claro que quién dice que no se puede repetir.

El Betis, en busca del tiempo perdido

El Real Betis trata de zanjar muchas de las dudas que ha creado en estas primeras jornadas de Liga con todo un partidazo ante un grande como el Valencia. Héctor Cúper, que a lo largo de la semana ha asegurado que ha visto fantasmas del pasado en el equipo, se ha propuesto modificar muchos de los vicios que acompañan a la plantilla, sobre todo en defensa, donde la cantidad de goles encajados no responde a lo que él quiere del equipo. En este sentido, en defensa contará con la ausencia asegurada de Nano, que se someterá el lunes a la operación de rodilla por la que estará seis meses de baja. Su sustitución está abierta, aunque parece que Melli cuenta con más opciones que Rivas o Lima siempre que se haya recuperado del golpe que sufrió en el entrenamiento del pasado miércoles. También recupera a Xisco, que sale de lesión. Los precedentes de los partidos entre Betis y Valencia son relativamente esperanzadores, con 21 victorias verdiblancas, 14 empates y 11 victorias visitantes, aunque de todos los compromisos anteriores, el más interesante fue el de la pasada campaña. Por aquel entonces, el Real Betis de Luis Fernández se encontraba en una situación complicada, y el mes de enero le sirvió para remontar posiciones con victorias como la del Manuel Ruiz de Lopera ante el equipo ché, al que doblegó por dos goles a uno. Con el morbo añadido que siempre supone el retorno de Joaquín a su casa, el Betis necesita ganar para espantar fantasmas.