El Sevilla Fútbol Club debe dejar atrás el choque ante el Milán y pensar solamente en un partido que puede marcar toda la temporada y es que a pesar del buen resultado en la ida (2-0) el conjunto que entrena Juande Ramos tendrá en el estadio Olímpico de Atenas un duro escollo ante el AEK de Lorenzo Serra Ferrer, en el ya famoso partido suspendido de la pasada semana.
Dejando atrás el cansancio y como no, el palo anímico la escuadra de Nervión que llegó a tierras helenas con la baja de Duda pero con el gran fichaje de Alves, tiene solamente que mantener una renta que incluso se antoja corta trás ver en Sevilla el nivel del equipo griego. Así que se espera un choque en el que los amarillos saldrán a marcar cuanto antes y en el que la contra mortal de los de Juande puede finiquitar la elimatoria. 90 minutos para cerrar un trámite, para estar de pleno derecho en ese grupo H de la máxima competición continental y sobretodo para pensar en el Arsenal, un rival más acorde al nivel del bicampeón de la UEFA.